Todo depende de nuestra atención y actitud
Te invito a leer esta historia que no tiene desperdicio.
Cuentan que en una gran tienda de Madrid llamada El Corte Inglés comenzó a trabajar un nuevo vendedor, como algunos conocen se trata de un gran edificio que cuenta con varios pisos y una enorme cantidad de artículos de los más variados.
– ¿150.000€?. ¿Y que vendió?
Luego le dije que unos anzuelos tan buenos merecían una buena caña, así que le vendí dos pequeñas y una grande, también le vendí los cebos y como todo eso no iba a llevarlo en la mano, también le vendí una caja grande para los artículos de pesca.
Le pregunté donde pescaba y me dijo que le gustaba pescar en el mar, entonces le ofrecí un bote con motor fuera borda que también compró, cuando se iba me dijo que el bote le iba a rayar el coche, entonces le ofrecí un Land Rover 4×4 que le encantó…, como iba a estar en el bote y el Land Rover lo tendría que dejar en el puerto le instalamos un equipo de seguridad de última generación…, y como la pesca iba a ser mar adentro tambiéndecidió llevarse unas redes.
Por último dado el valor de lo comprado. le sugerí asegurar todo y agregar un seguro de vida por accidente o invalidez, cosa que le pareció muy acertada al salir de pesca mar adentro.
Digo lo de ser paciente porque, como bien me explicaron recientemente en una charla, las personas realizamos generalmente la siguiente pregunta: «Hola ¿cómo estás?» no porque nos interesa saber cómo está la otra persona, sino porque egoístamente queremos hablar de nosotros y si hablamos no escuchamos y escuchar es un principio básico de la venta.
Norberto