12Sep, 2016
El Bundesbank recomienda elevar a 69 años la edad de jubilación
DEBATE EN ALEMANA HACIA 2060
El Bundesbank, el banco central de Alemania, ha asegurado que será imprescindible ampliar el plazo de actividad de los trabajadores ante el envejecimiento de la población germana. A juicio de la autoridad monetaria, será necesaria llevarla hasta los 69 años para 2060. En el informe mensual del Bundesbak, recogido por Bloomberg, asegura que elevar la edad legal de jubilación contribuiría a aliviar la presión sobre las arcas públicas germanas y garantizar la viabilidad del sistema público de pensiones.
La reforma de las pensiones en Alemania prevé el incremento gradual de la edad legal de jubilación desde los 65 hasta los 67 años para 2030, así como un incremento de la contribución por parte de los ciudadanos hasta el 22%.
No obstante, el banco central alemán, Bundesbank, sugiere abrir el debate en torno a la posibilidad de elevar hasta los 69 años para 2060, así como incrementar la contribución de los trabajadores al 24% de sus ingresos brutos ante el aumento en la expectativa de vida y la caída de la natalidad en el país.
«La confianza en las pensiones podría reforzarse y la incertidumbre sobre la estabilidad financiera podría reducirse si los parámetros de la edad de jubilación, niveles de provisiones y tasas de contribución se ajustasen a largo plazo», indica el organismo monetario.
Y esto sucede en un marco de mejores previsiones económicas: el Bundesbank confía en que Alemania, gracias al consumo privado, crecerá con fuerza este año, pese a la ligera ralentización del 2do. trimestre.
En opinión de la autoridad monetaria, que el PIB haya crecido en el 2do. trimestre sólo 0,4% tras avanzar 0,7% en el 1er. trimestre no es motivo de alarma, porque hay solidez en las cuentas fundamentales. La mayor economía europea «podría crecer también en verano en sintonía con la realmente fuerte tendencia económica de fondo», según el documento.
El Bundesbank considera que el consumo privado seguirá siendo el principal acicate al crecimiento, ayudada por el sector exterior -tradicionalmente potente- que repuntará de forma «sólida».
La entidad también apunta que las cuentas públicas alemanas podrán seguir disfrutando de la situación del mercado laboral, en máximos históricos de población empleada, y avanzando a sus mínimos de desempleo.
El Bundesbank estima que la administración federal alemana volverá a registrar un ligero superávit fiscal en este ejercicio, aunque menor que el del año pasado, acompañada de una reducción de la deuda total.
A juicio de la autoridad monetaria, esta situación fiscal podría aprovecharse para reducir los tributos que realizan empleados y empleadores, un dinero que podría destinarse a otros fines y animar la economía.
Con respecto a la decisión británica de abandonar la UE, el Bundesbank cree que a corto plazo apenas se dejará sentir en la evolución económica de Alemania.
6Abr, 2016
Es decir, el ahorro para nuestro retiro del mundo laboral no debería estar en manos de la
La estafa de la jubilación estatal
La jubilación debe ser cosa de cada uno.
Es decir, el ahorro para nuestro retiro del mundo laboral no debería estar en manos de la
dirigencia política
Por Roberto Cachanosky.
Si bien hoy en día es políticamente incorrecto hablar de la jubilación privada, tengo bien en claro que la mayor estafa que el populismo le ha hecho a la gente es la jubilación estatal. En nombre de la solidaridad social, el sistema de reparto ha sometido a generaciones de trabajadores a que terminen sus días de jubilados como verdaderos mendigos.
Es común ver como muchos jubilados caen en el error de decir que los estafaron porque los aportes que hicieron durante años se los robaron dado que cobran jubilaciones muy magras. La realidad que tanto los llamados aportes al sistema previsional que hacen los que están en actividad así como las contribuciones que realizan las empresas por cada trabajador son simples impuestos. En efecto, no es el aporte del trabajador y la contribución patronal de la empresa un ahorro destinado a cubrir la vejez del actual trabajador. Es solo un impuesto que se aplica para financiar el pago de los haberes de los actuales jubilados.
Dicho en otras palabras, los actuales jubilados tienen su jubilación de los impuestos que pagan los trabajadores que actualmente están en actividad así como de las contribuciones patronales. En un sistema de reparto no hay tal cosa como un ahorro para cuando uno se jubila. Solo hay impuestos que se cobran sobre la nómina salarial para mantener a los actuales jubilados. Y, los que hoy estamos en actividad, el día que nos jubilemos recibiremos los mendrugos del estado benefactor por los impuestos que pagarán los que estén en actividad en ese momento.
Resalto, en un sistema de reparto no hay ahorro. Nadie puede reclamar por sus aportes porque esos aportes fueron solo impuestos para sostener a los jubilados del pasado.
Matemáticamente el sistema de reparto estatal es inviable porque:
1) al aumentar la esperanza de vida hay cada vez menos trabajadores en actividad para sostener por cada jubilado.
2) la alta carga tributaria sobre la nominal salarial más la disparatada legislación laboral hace que mucha gente prefiera trabajar en negro en el caso argentino y, por lo tanto, el trabajo en negro no paga impuestos para sostener a los
actuales jubilados.
actuales jubilados.
3) en el caso argentino hay que agregar que hoy en día, fruto del populismo, mucha gente vive de un subsidio “social” y por lo tanto no aporta para que los jubilados puedan mejorar sus ingresos.
4) la tasa de desocupación es tan alta que se reduce aún más la relación cantidad de trabajadores en actividad por cada jubilado.
5) el populismo ha destruido de tal manera la productividad de la economía que los salarios reales son bajos.
Como las jubilaciones son un porcentaje de los impuestos que se cobran sobre salarios reales bajos,
inevitablemente los jubilados tienen jubilaciones de hambre.
inevitablemente los jubilados tienen jubilaciones de hambre.
Los que hoy dependen del sistema de reparto estatal como los que nos jubilemos en el futuro no podemos esperar nada del estado salvo miseria.
Y esto es culpa de la misma gente que ha votada estatismo y rechazada la libertad.
La gran mayoría de la dirigencia política y buena parte de lapoblación aplaudió cuando literalmente nos robaron los ahorros que teníamos en las AFJP, sistema que tampoco comparto en la forma en que fue implementado en Argentina, pero al menos es menos malo que la estafa que es el actual sistema de reparto.
La jubilación debe ser cosa de cada uno. Es decir, el ahorro para nuestro retiro del mundo laboral no debería estar en manos de la dirigencia política que ha demostrado ser lo suficientemente incapaz y estafadora como para saber de antemano que nos condenará a la miseria el día que nos retiremos.
Más de un dirigente político, suponiéndose un ser superior al resto, argumentará que si no se obliga a la gente a aportar cuando llegue el momento de jubilarse no tendrá ahorros porque no todos son previsores.
En consecuencia, para que no vivan en la miseria en el futuro hay que obligar a la gente a aportar a un sistema de reparto. A la vista de todos están los resultados de lo previsores que fueron los que se creían seres superiores. Una gran masa de jubilados viviendo con la mínima que no alcanza para nada.
Nuestros abuelos y bisabuelos ahorraron sin que nadie les dijera cómo tenían que hacerlo. Muchos de ellos ahorraron comprando propiedades para vivir de los alquileres cuando se retiraran. Esto funcionó hasta que llegó Perón y estafó a los jubilados con la ley de alquileres.
Las AFJP, a pesar de ser un sistema ampliamente mejor que el de la jubilación de reparto, tenían errores como altas comisiones para comprar bonos del estado, con lo cual pagábamos una comisión por tener riesgo estatal. Negocio chino. Además no había competencia con aseguradoras del exterior.
En Chile mataron el sistema de reparto y funciona el sistema de capitalización en las AFP, donde cada persona tiene individualizados sus ahorros. Esos ahorros perteneces a cada persona con nombre y apellido a diferencia del sistema de reparto.
Para que tengamos una idea del destrozo que se hizo en Argentina con los ahorros, el Fondo de Garantía de Sustentabilidad, que no es otra cosa que el título que el kirchnerismo le puso al robo de nuestros ahorros en las AJFP, maneja unos U$S 30.000 millones, en tanto que las AFP chilenas administran U$S 150.000 millones. Es ahorro de largo plazo que puede financiar hipotecas para que los jóvenes puedan comprar su primera vivienda sin necesidad de recurrir al denigrante curro del plan PROCREAR por el cual el estado decide a quién le otorga un crédito para construir su casa.
El ahorro de largo plazo, como es el caso del ahorro individual para las jubilaciones, constituye un formidable mecanismo de financiamiento de créditos hipotecarios a tasas muy bajas o de inversiones en el sector productivo. Incluso si el que ahorra para su jubilación lo hace en forma de propiedades, genera un círculo virtuoso de ahorro y crecimiento económico. Mueve la actividad de la construcción y aumenta la oferta de propiedades en alquiler con lo cual es más fácil acceder a una vivienda, por ejemplo para las jóvenes parejas actuales porque aumenta la oferta de propiedades en alquiler.
En síntesis, soy consciente de que criticar la jubilación de reparto estatal y defender la privada es políticamente incorrecto, pero me niego a aceptar que por decir lo políticamente correcto se siga estafando a generaciones de gente que al llegar el momento de su retiro advierte que los políticos, usando el estado, lo estafaron sin piedad dejándolo en la miseria más absoluta.
Recapacitemos para que las futuras generaciones no tengan que padecer el abandono al que el “estado benefactor” ha dejado a los actuales jubilados.
NOTA:
Tienes que conocer la propuesta que nuestro Asesores en Planificación de Retiro y Pensión te pueden ofrecer.
Con un aporte siempre accesible en relación a tus ingresos reales construímos un placentero retiro en lugar de un traumático futuro.